En mi opinión la hipnosis es meditación con una meta.
Es acceder al conductor de nuestra vida pasando la frontera del factor crítico, un trabajador del subconsciente que vive en el consciente, cuyo trabajo es el de filtrar la información de fuera, analizarla y permitir el paso sólo a aquello que considere cierto.
La mente subconsciente es altamente inteligente, tiene otro lenguaje y es la responsable en un 95% de lo que somos, de cómo somos; es nuestro hogar.
A través de la hipnosis podemos acceder a ese lugar y reprogramar la información.
¿Cómo de efectiva es la hipnosis?
Los siguientes datos sobre la tasa de recuperación revelada en una investigación de reportes de psicoterapia desarrollada por el Dr. Alfred Barrios, de la UCLA, habla de los resultados de la terapia a través de hipnosis:
¿Por qué hipnosis?
Porque funciona.
Cuando nos relajamos y sentimos que estamos seguros, nuestro cuerpo se abre a recibir sugestiones.
Si deseas cambiar tus hábitos tenemos que ir a buscarlos allí donde viven, en la mente subconsciente.
¿Hay que creer en la hipnosis para que funcione?
La respuesta es no.
Aunque no se crea, funciona. El único requisito es tener la predisposición de probarla. No se puede hipnotizar a alguien que no quiera.
Cuanto más se deja llevar uno, más control encuentra para dirigir su vida.
¿Qué se siente en la hipnosis?
La experiencia es individual para cada persona. Así como para algunos es una sensación pesada en el cuerpo, para otros sin embargo es como volar. Todo es posible y mágico.
El común denominador a todas las experiencias es el alivio del estrés y la regeneración del cuerpo.
En realidad la hipnosis es un estado que todos conocemos, sólo que no somos conscientes de ello.
Durante la hipnosis se tiene siempre el control y nunca se hace o dice cosas que uno no quiera.
¿Puede todo el mundo ser hiptonizado?
La respuesta es sí.
Siempre que la persona quiera ser hipnotizada y no lo haga por imposición.
¿Cómo se realiza un sesión de hipnosis?
En persona a través de una sesión en consulta o también Online.
Tipos de Hipnosis
Las sesiones de hipnosis son difíciles de planear, puesto que son procesos que varían dependiendo de muchos factores. Por este motivo, se decide individualmente qué tipo de hipnosis es el más adecuado para cada situación.
Hipnosis analítica
Tiene sus similitudes con el psicoanálisis en el sentido en que se establece un diálogo entre terapeuta y cliente, mientras que éste se encuentra en estado de trance.
Durante la conversación se trata el problema y se activan los recursos internos y la fuerza del cliente, haciendo que éste perciba el problema desde otra perspectiva totalmente distinta.
El proceso se refuerza a través de sugestiones, que debido al estado trance, se integran muy fácilmente en el sistema del cliente.
Simpson Protocol
Hipnosis sin palabras. Es una técnica creada por la canadiense Ines Simpson en la que se tratan los problemas sin la necesidad de hablar sobre ellos.
La hipnosis se realiza en un estado profundo de relajación llamado Esdaile en el que se utilzan las señales de los dedos como lenguaje de comunicación con la mente subconsciente.
Cada sesión dura más o menos 2 horas y generalmente bastan 2 sesiones para solucionar el problema.
El no tener que explicar ni mencionar el problema hace de este método una herramienta perfecta para muchos trastornos que son tabú o situaciones que no se sabe bien cómo explicar.
Regresión a la causa. R2C (Regress to Cause)
Cada problema tiene un origen, pero ¿podemos siempre acordarnos de cuándo se originó?
Nuestra mente subconsciente sí, puesto que se encarga de grabar todas las experiencias que vivimos para protegernos de futuros peligros. A veces, una falsa interpretación de los hechos puede quedar grabada como un bloqueo o miedo durante mucho tiempo.
La regresión permite volver a ese punto donde se originó el problema y tratar las emociones que se vivieron en ese momento para neutralizarlas.
Una nueva interpretación de los hechos ocurridos conlleva a una nueva forma de percibir la situación, de sentir las emociones; lo que desemboca en nuevas formas de pensar y reaccionar.